miércoles, mayo 23, 2007

MARIONA MASGRAU HA MUERTO.


Mariona en la Plaza del Pino de Barcelona, en 1978.
Mariona Masgrau, titiritera fundadora de La Fanfarra junto con Eugenio Navarro y Toni Rumbau, y creadora de la mayoría de las marionetas de la primera etapa de la compañía, fundadora asimismo del Teatro Malic de Barcelona (1984-2002), murió el lunes 21 de mayo en Hospital de San Pablo de Barcelona.

Aquejada por la súbita aparición de una enfermedad que la cogió de sorpresa demasiado tarde, Mariona Masgrau ha vivido con serenidad y valentía la tragedia de su rápida fuga de este mundo. Su temple aventurero se ha manifestado una vez más en esos últimos días de su vida, encajando lo inevitable con aplomo y sabiduría.

Debemos recordar que Mariona Masgrau, además de ser una creadora excepcional de marionetas, inició también en su última etapa de marionetista una brillante carrera como solista, a través de una primera trilogía sobre la Mujer (Mangalena, Constantina y De tanto que te quiero), y la serie de espectáculos centrados en el personaje de Sophia.

Tras el cierre del Teatro Malic, Mariona Masgrau abrió un centro-taller de marionetas llamado Espai Fènix en el barrio de Sants. Una iniciativa truncada por su muerte. Allí queda su extraordinario patrimonio de muñecos de todas las épocas de La Fanfarra más sus propios espectáculos de los últimos años.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Qué viva Mariona en la memoria de todos los que la hemos conocido! Gran artista y gran persona. De calado inusual. Nobleza de espíritu y ánimo guerrero. Modesta y orgullosa. Grande su dignidad. Fantasiosa y realista. Mujer de armas tomar. ¡Una gran mujer!¡Qué viva para siempre!

isabel dijo...

Recuerdo con nostalgia la primera vez que vi a Mariona en la plaza del Pi. Me sentí muy feliz viendo las aventuras de Malic. Era el 77, yo estaba de paso por la ciudad. Ahora vivo aquí. Me encanto el último espectáculo de Mariona en la sala Becket. Impresiona mucho que muera alguien que ha conocido.

Anónimo dijo...

La conocí hace tiempo aunque nunca pude hablar largamente con ella. Me impresionaba su porte digno y elegante, sobretodo cuando manipulaba las marionetas de hilo. Su sonrisa concentrada tenía la personalidad de quién además de manipular, ha construído ella misma los muñecos. Aunque su trabajo en general ha sido premiado y considerado, a través de la compañía y del teatro que fundó, creo que no se ha valorado suficientemente su labor artística de constructora. No estaría mal una exposición retrospectiva de su trabajo, ¿no le parece?

Una admiradora.

Anónimo dijo...

Mariona, exquisita artista del silencio: delicada y atrevida, valiente y sutil. ¡Cómo añoramos su trabajar silencioso, sus palabras quedas, su discreción artística tan ambiciosa...! Se fue casi sin decir nada, a la chita callando. Se llevó sus misterios con los que arropava en silencio a sus amigos. Ella se fue llena, nosotros nos quedamos tan vacíos...

Anónimo dijo...

¡Hola amigo Toni!, me dejas de piedra...no reacciono...no se que decirte...hacía días que no entraba en tu "Blog"...De todo corazón me uno en el pesar que te debe embargar en estos momentos.
A mi amiga Mariona solo me queda que lanzarle ¡Un fuerte abrazo al vacío de los espacios.
-Joseba Ayensa- (Poeta-cantor)